EXCÉLSIOR
Portland, EE. UU.- El oeste de Estados Unidos enfrenta una serie de incendios mientras que la zona este sigue golpeada por inundaciones.
Casi 60 incendios destruyeron áreas secas de árboles y maleza desde Alaska hasta Wyoming, de acuerdo con el Centro Nacional Interagencias para Incendios.
Arizona, Idaho y Montana representaban más de la mitad de los incendios grandes activos.
El mayor de los incendios en Estados Unidos se reporta en el estado de Oregon. Se trata del Bootleg Fire, que ha consumido unos 818 kilómetros cuadrados y 21 viviendas.
Además, otras dos mil casas están en riesgo debido al siniestro que no ha sido contenido.
Sufrimos condiciones meteorológicas extremas. La humedad es baja, los elementos combustibles son muy inflamables y todo eso genera condiciones para una actividad significativa de incendios”
Daniel Omdal, portavoz de bomberos.
A esto se suman las inundaciones que afectan el otro lado del país vecino.
De acuerdo con un reporte de la Agencia Nacional Atmosférica y de Océanos (NOAA, por sus siglas en inglés), la frecuencia de las inundaciones altas se duplicó desde el año 2000.
Según un informe de la dependencia registrado ayer, pronósticos advierten que se incrementará de cinco a 15 veces en los próximos 30 años.
En este contexto, las pérdidas aseguradas en tierra debido al huracán Elsa serán de unos 240 millones de dólares sólo en la Unión Americana, de acuerdo con la compañía Karen Cark & Co, que estima daños originados por desastres naturales.
La tormenta tropical causó inundaciones en varios estados del este en su paso por Florida, Georgia y hasta Nueva Inglaterra.
La tormenta dejó un muerto en Florida y causó un tornado en una base de la armada en Georgia.