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21 mayo, 2024
Opinion

RECETARIO

por Iván Peralta

 

Chuletón

 

Después de innumerables borregazos, finalmente ayer se concretó la detención del ex fiscal Jorge Winckler Ortiz, en un operativo realizado en Puerto Escondido, Oaxaca, donde desde hace varios meses se decía que el ex funcionario se encontraba.

 

En esa tesitura, llama la atención la filtración de un supuesto diálogo que se habría dado al momento de la detención, la mañana de este lunes en la costa oaxaqueña, en la que supuestamente Winckler dijo que otras caerían junto con él y que habría revelado donde se encuentra escondido otro de sus ex colaboradores.

 

La filtración apunta a que Luis Eduardo Coronel Gamboa, quien se desempeñó como Fiscal de Personas Desaparecidas, se encuentra en Cancún, Quintana Roo. Sería el siguiente objetivo de las autoridades veracruzanas.

 

Como se recuerda, a Coronel Gamboa se le acusa del delito de tortura presuntamente cometido contra Gilberto “N”, ex director general de Servicios Periciales de la entonces Procuraduría General de Justicia (PGJ).

 

Según se detalla en expedientes, el caso acreditado fue de tortura y otros tratos crueles inhumanos y degradantes, cometidos en perjuicio de Gilberto “N” a quien presuntamente se le violaron el derecho a la integridad personal en su modalidad de tortura física y psicológica, así como el debido proceso.

 

En los hechos narrados por la parte quejosa, se señala que Gilberto “N” fue detenido el 3 de abril de 2018 por su probable participación en hechos constitutivos de un delito, por lo que fue trasladado al penal de Pacho Viejo.

 

Fue en dicho penal donde Gilberto “N” fue víctima de presuntos actos de tortura, con la finalidad de rendir declaración en contra de otra persona.

 

Estos hechos, se atribuyen a servidores públicos de la Fiscalía General del Estado de Veracruz, entre ellos Luis Eduardo Coronel Gamboa, quienes supuestamente actuaron con la tolerancia de funcionarios de la Dirección General de Prevención y Readaptación Social, dependiente de la SSP de Veracruz.

 

Gilberto “N” narra en ese escrito que fue visitado en el penal por un funcionario de la FGE y a él le atribuye este tipo de tortura.

 

“El día diez de mayo de 2018, a la una de la mañana, fui despertado por el director del Penal de Pacho Viejo, Gabriel “N” y un custodio”, dijo al referir cómo fue trasladado a la oficina del director del penal, donde lo esperaba el entonces Fiscal de Personas Desaparecidas, Luis Eduardo Coronel Gamboa.

 

Según el acusado, el fiscal Coronel Gamboa habría acudido a hacer un trato, en el cual le solicitaba que declarara en contra del ex fiscal general de Veracruz, Luis Ángel Bravo Contreras.

 

Asimismo, Gilberto “N” acusó que su declaración fue cambiada, por lo que no reconoció ni el contenido ni las firmas plasmadas en ella.

 

Estofado

 

Chamba para la Contraloría… En pleno periodo vacacional, empleados de la Secretaría de Salud de Veracruz se manifestaron afuera de las instalaciones de ésta dependenciapara exigir la destitución del director de Protección contra Riesgos Sanitarios, Bartolo Avendaño Borromeo.

 

Parece que es una ficha, pues el propio personal sostiene que el funcionario ha incurrido en actos de nepotismo, abuso de autoridad, malversación de recursos públicos, conflictos de intereses, tráfico de influencias y violencia de género.

 

Y no sería cosa menor, pues se piensa que hay al menos una veintena de sus familiares trabajado en las jurisdicciones sanitarias de la entidad veracruzana, y usa vehículos oficiales para pasear a sus perros.

 

Los empleados agregaron que Avendaño Borromeo es dueño de siete laboratorios en el puerto de Veracruz a nombre de su esposa, lo que calificó de un conflicto de intereses.

 

“El señor ha incurrido en irregularidades, tiene a un sobrino trabajando con él porque lo trae todos los días desde Veracruz. Se trata de un abuso de autoridad, prepotencia, quiere que nos inclinemos ante él porque está respaldado por el Gobernador”.

 

Por ello, solicitaron la intervención del gobernador Cuitláhuac García Jiménez para que destituya al funcionario pues de lo contrario no liberarán las instalaciones.

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