por Iván Peralta
Manchamantel
Buscando no perder el control de un suculento presupuesto, nos cuentan que desde el propio Organismo Público Local Electoral (OPLE) emprendieron una campaña de lodo en contra de varios aspirantes a ocupar las vacantes del Consejo General mandando tarjetas informativas sobre supuestos nexos entre varios postulantes con actores políticos locales.
Ilusamente, en la aldea creen que en México, los consejeros del INE desconocen las cartas credenciales de los 19 aspirantes, pues obviamente solo reciben información parcial y de dudosísima objetividad, pues medio OPLE busca colocarse en alguna de las dos posiciones.
Los gobernantes locales solo ven pasar frente a sus ojos los posibles escenarios, pues que desde la CDMX harán los nombramientos sin miramientos a querencias y malquerencias del gobierno local.
Para nadie es un secreto que el propio INE mantiene una afrenta con el presidente López Obrador y en esta etapa definitoria de los nombramientos, desde Veracruz buscan acomodar las fichas para que la decisión recaiga solo en personas ligadas a ellos, con quienes han trabajado por años, comparten ideologías y esperemos que esa afinidad no incluya acuerdos inconfesables.
Acá desde las esferas del Poder en Veracruz, nadie, llámese como se llame, pudo colocar candidatos, pues desde que fueron detectados en las primeras instancias, fueron rasurados en las primeras de cambio, lo cual hasta cierto punto se antoja saludable.
Sin embargo, las maniobras para dejar el juego entre sus recomendados ha despertado suspicacias, pues en ese listado de 19 finalistas, hay quienes se han topado con pared en tres o más procesos similares anteriores.
Y ya, en una maniobra desesperada, han intentado ligar a otros aspirantes con actores políticos, inventando novelas y teorías de conspiración que rayan en lo inverosímil.
Patas en escabeche
Tomen nota… El Tribunal Electoral de Veracruz (TEV) determinó que el alcalde de Ixhuatlán del Sureste, Fabián de Jesús Cruz Hernández, obstaculiza las labores de la síndica, Angélica Ascencio Santiago, al no informarle sobre los estados financieros y convenios que se firman a nombre del ayuntamiento.
En sesión del tribunal se discutió el expediente TEV-JDC-256/2022, promovido por la síndica, y declaró que tanto el alcalde como el tesorero han bloqueado sus funciones.
Angélica Ascencio Santiago indicó que a seis meses de iniciada esta nueva administración, el alcalde no le informa sobre los movimientos que se hacen en el municipio, por eso no ha firmado ningún documento.
En su denuncia manifestó que el alcalde les manda la convocatoria a las sesiones de cabildo, pero no les pasan los anexos con los documentos que se van a firmar para que puedan analizarlo de acuerdo al procedimiento administrativo.
Expuso que se le ha pedido que les presente toda la información, pero sigue la renuencia de Cruz Hernández, por eso presentó demanda, para deslindarse de cualquier responsabilidad, ya que ella es la representante legal del municipio.
Angélica Ascencio dijo que esta “falta de comunicación” se refleja en todos los ámbitos, pues tampoco le informa sobre los actos y compromisos que ella debe asumir como representante del municipio.
El TEV no consideró los bloqueos como violencia política, sólo determinó que se le deben restablecer todas sus atribuciones a la síndica.
Obleas
En un mensaje dirigido al Pueblo de México con motivo del asesinato de dos sacerdotes jesuitas en la Sierra Tarahumara de Chihuahua, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) advirtió que “el crimen se ha extendido por todas partes trastocando la vida cotidiana de toda la sociedad.
La Iglesia Católica condenó los “niveles de crueldad inhumana en ejecuciones y masacres que han hecho de nuestro país uno de los lugares más inseguros y violentos del mundo”; hizo un llamado al Gobierno Federal y a los distintos niveles de autoridades para “revisar las estrategias de seguridad que están fracasando.
El manifiesto plantea que es tiempo de escuchar a la ciudadanía, a las voces de miles de familiares de las víctimas, de asesinados y desaparecidos, a los cuerpos policiacos maltratados por el crimen, a los académicos e investigadores, a las denuncias de los medios de comunicación, a todas las fuerzas políticas, a la sociedad civil y a las asociaciones religiosas.
Incluso, se reconocen que ante esta situación, como pastores de la comunidad católica, “no hemos hecho lo suficiente en la evangelización de los pueblos y que es necesario redoblar esfuerzos”.