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28 abril, 2024
Opinion

RECETARIO

por Iván Peralta

 

Choriqueso

 

Al igual que su tocayo de apellido, ese que opera los programas sociales de la federación, cuentan que hay otro funcionario que se puede meter en problemas muy delicados.

 

Se trata del director de la Comisión del Agua del Estado de Veracruz, Félix Jorge Ladrón de Guevara Benítez.

 

Y es qué hay mujeres que ya no aguantan el acoso del titular de la CAEV y hasta están dispuestas a ventilarlo a la luz pública a través de los famosos tendederos.

 

Los señalamientos van en el sentido de que el director se siente todo un galán, pues siempre anda vestido con ropa de las mejores y costosas marcas e, incluso, algunos le apodan en la dependencia como el “todas mías”.

 

Lo más grave es que Jorge Ladrón de Guevara dice que es inmune de las intrigas  porque  está muy bien apadrinado por un alto funcionario de la Secretaría de Finanzas y Planeación, quien fue el que lo puso al frente del Organismo Público Descentralizado.

 

Lo que pierde de vista es que si el tema de acoso se ventila, principalmente en las benditas redes, el asunto va a llegar incluso al altiplano y el padrinazgo aldeano no le va a alcanzar y en una de esas no toca ni baranda.

 

Alambres

 

Los que andan súper enchilados y con justa razón son los prestadores de servicios turísticos de la llamada Costa Esmeralda y Tecolutla. Ya los traen de bajada los a,antes de lo ajeno y aunque no directamente, les parten la mandarina en gajos.

 

En las últimas semanas, a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) le han robado unos 5 kilómetros de cables de alta tensión, pues el cobre del que están fabricados tiene un costo considerable en el mercado.

 

Y desde hace varios días en hoteles y restaurantes, y por supuesto la población en general, se encuentran sin energía eléctrica y esto además de las molestias obvias ha comenzado a ocasionar pérdidas económicas, cancelaciones en las reservaciones y hasta exigencia en la devolución del costo de las habitaciones, pues los turistas no aguantan ni el calor ni las molestias de andar en penumbras.

 

Y para colmo, ninguna de las autoridades estatales los ha apoyado… de hecho, ni siquiera Comisión Federal de Electricidad les ofrece una solución a éste problema. Les han respondido que al parecer el crimen organizado estaría detrás del robo de cobre, pero eso no les ayuda a salir del atolladero.

 

Están a la espera de que la Secretaria de Turismo meta el hombro y nadamás han sido ignorados en sus peticiones.

 

 

El fin de semana pasado, en pleno periodo vacacional, adrones de cobre de la red eléctrica que alimenta a la zona hotelera de Tecolutla robaron más de un kilómetro de cableado y provocaron pérdidas millonarias.

 

En esa ocasión, se denunció que cuadrillas de ladrones desmantelaron la red eléctrica a medianoche en el tramo Gutiérrez Zamora-Tecolutla, los hoteles estaban llenos y provocó un caos, la Comisión Federal de Electricidad pudo restablecer la energía hasta las 18:00 horas.

 

Horas después, los ladrones volvieron a robar el tendido electrifico en el mismo tramo de la carretera federal con un daño similar ya que muchos hoteles aun se encontraban llenos y los restaurantes reportan perdidas en sus almacenamientos de refrigeración.

 

Los afectados reclaman una solución de fondo a la CFE y denuncias para que se investigue y detenga a los responsables, para evitar nuevas pérdidas económicas y el descrédito de ese destino turístico que goza de un amplio prestigio en esa zona.

 

Cebada

 

La aldea… dos ciudadanos alemanes estuvieron a punto de ser linchados por pobladores de la colonia El Águila, del municipio de Nogales, al confundirlos con presuntos secuestradores de niños.

 

El propio alcalde Ernesto Torres Navarro informó que tuvo que acudir al rescate de 2 personas provenientes de Alemania, que venían “mochileros” a Veracruz, y que al caerles la noche decidieron pernoctar en un lote baldío en el municipio.

 

Al ver extraños a los lugareños, alguien soltó la versión que se trataban de dos secuestradores, lo que provocó la alerta de la población, pero la pronta intervención de la Policía Municipal y del alcalde impidió que fueran agredidos.

 

Ante tal situación, el presidente municipal los resguardó en las oficinas del Ayuntamiento, donde pudo entrevistarlos y saber que sólo se encontraban de paso sin un rumbo fijo, y que acampan donde les cae la noche. Tras aclarar la situación a los pobladores, ofreció a los dos ciudadanos alemanes un sitio donde pudieran acampar sin riesgo alguno.

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